Hoja de ruta a la escuela del siglo XXI

Escuelas KIPP: Mayor dedicación al Aprendizaje
Las Cámaras de Comercio Binacionales y la integración económica

Basado en las experiencias de estas escuelas XXI y de otros varios casos, sirven de ejemplo para entender el fundamento de su desarrollo, mostrando las razones y los motivos de la investigación científica.

Al tener suficientes recursos, la preparación adecuada y el interés suficientes como para que las aulas dejen de ser ese lugar icónico, donde el maestro de rienda suelta sus conocimientos y los alumnos los asimilen con mayor o menor éxito, representa un error no avanzar hacia la educación integral, desaprovechando las nuevas tecnologías haciendo que el sistema educativo claudique afectando el futuro de los alumnos limitando su potencial de desarrollo.

Teniendo a disposición las tecnologías para este cambio en las aulas, aún le cuesta al sistema educativo adaptarse a los nuevos tiempos. Se mencionan cuatro desventajas: 1) La falta de autonomía en algunos centros, que dependen de una administración o un entorno y que limita su capacidad para cambiar las cosas; 2) El perfil de un profesorado muy conservador; 3) El proceso de selección de este profesorado, que debería ser constantemente evaluado para que no se anquilose y apueste por modernizar su forma de enseñar. 4) El marco jurídico que regula la actividad educativa.

Los profesores deben reinventar su metodología de enseñanza apoyándose en las nuevas tecnologías y dejen de circunscribirse a la transmisión de teorías clásicas para convertirse en guías que promuevan la creatividad, el trabajo en equipo y la aplicación de lo aprendido en la vida cotidiana. El papel del alumno sería más activo.

Por lo tanto, hay que impulsar una iniciativa con muchísimo de lo que aprender. El Viaje a la Escuela del Siglo XXI es un proyecto de Alfredo Hernando en el que este psicólogo especialista en la educación da a conocer ‘súper escuelas’ de todo el mundo, desde España a Japón, pasando por Bangladesh, Chile o EEUU. Todos estos centros, estén donde estén, demuestran que no importa el lugar sino la intensión de cambiar las cosas.

En el caso de un centro concertado de Montserrat en Barcelona, donde se aplica la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, resulta que en un ambiente de total diversidad, con espacios abiertos y donde los alumnos pueden discurrir con ingenio, reina la concentración en su sentido más amplio. Otro caso sobre las escuelas de ‘Los Pies Descalzos’ en la India, donde alumnos de todas las edades han aprendido a leer y a escribir, a cocinar y a construir un panel solar. Por último, una singular tienda de suministros para superhéroes de Brooklyn donde lo mismo se puede comprar una serie de dibujos animados como recibir una clase personalizada. Aquí los alumnos acuden de forma voluntaria a descubrir con sus tutores cuál es su verdadero talento y cómo potenciarlo.

Basado en las experiencias de estas escuelas XXI y de otros varios casos, sirven de ejemplo para entender el fundamento de su desarrollo, mostrando las razones y los motivos de la investigación científica. Por eso hay especial interés en observar esas escuelas que se están atreviendo a transformar la experiencia de escolarización en el presente y que vive en pleno proceso de crecimiento gracias a una sólida base en torno a cuatro fuentes de su currículo que sostienen, fundamentan y ofrecen las evidencias científicas de su transformación, a su vez, estas fuentes repercuten en cuatro grandes pilares que hacen posibles los cambios de su organización y en su cultura: la transformación día a día.

Las fuentes de currículum señalan a: 1) Psicológica: atender al comportamiento humano y a los procesos de aprendizaje; 2) Pedagógica: innovar en los métodos y en la práctica educativa; 3) Sociológica: adaptarse a los cambios de la sociedad; y 4) Epistemológica: estar atentos a las pistas que la ciencia y la tecnología nos dejan para afrontar los cambios en la escuela.

En cuanto a los pilares, tenemos: 1) Currículum, metodología y evaluación, encargándose de materializar los cambios necesarios en torno a los contenidos y las herramientas didácticas que se utiliza en el aula; 2) El modo en que los aprendices y profesores se relacionan, en la escuela XXI se redefinen las funciones que alumnos y profesores desempeñan en sus relaciones para aprender y enseñar en el aula; 3) La planificación y organización del centro; las escuelas funcionan ayudadas por un gran número de planes, requiere organizar el uso de los tiempos en horarios y grupos, propone un modelo de escuela más participativo, democrático y horizontal de comunicación y aprendizaje compartido por muchas escuelas, y también propone mejorar el plan de integración de las tecnologías de la información y comunicación; 4) El uso de los espacios. Existen muchas opciones que garantizan un uso inteligente del espacio para potenciar el aprendizaje. La escuela puede ser, tanto un museo como un semillero de talentos, una incubadora de emprendimientos, una cabina de concentración de iniciativas o, una biblioteca donde conducir las emociones.

En Síntesis: algunos de los secretos de aquellas superescuelas, se tiene los siguientes puntos: 1) Las escuelas movidas por los cincos valores que dan sentido a su propuesta: igualdad, decisiones colectivas, autosuficiencia y autoestima, descentralización y austeridad. 2) La flexibilidad institucional con la que han sabido crecer y desarrollarse desde sus inicios para responder, por sí mismos, a las preguntas de qué, quién, cómo cuándo educar en su realidad y entorno, uno de los modelos de escuela más innovadores del siglo XXI. 3) La escuela como un lugar para crear y experimentar, un lugar para aprender cómo no se puede hacer en ningún otro sitio. 4) Impulsar cambios modestos basándonos en la investigación y en las experiencias de éxito. La transformación de la escuela en el presente es imprescindible para la prosperidad de nuestro futuro. 5) El crecimiento y la innovación educativa se convierte en la necesidad del cambio generadoras de movilidad social. 6) Existen muchas opciones que garantizan un uso inteligente del espacio para potenciar el aprendizaje y hay incontables más opciones más allá de las sillas ordenadas en filas.

Moisés Bittán
@moisesbittan
Director de Finantop